Todas las verduras en crema o puré me apasionan, pero la crema de guisantes es una de mis favoritas. Esta vez, ha tocado con guisantes congelados que son mucho más económicos y de sabor están igual de buenos; pero con frescos, maravilla. Una crema ideal para hacer en cualquier momento. Sobre todo cuando vas con poco tiempo, ya que la preparas en un plis plas y seguro que tienes todos los ingredientes que necesitas en casa.
Queda preciosa tanto si la presentas en plato como en vasito con un topping de crujiente de jamón, langostinos salteados o como he hecho yo en la receta, unas bolitas de queso de untar rebozadas en sésamo tostado.
Una de las cosas que más me gusta es de esta crema es su color verde intenso que contrasta a la perfección con el blanco de las bolitas que he utilizado para decorar, que se derriten al moverlas con el calor de la crema. Queda muy tentadora para sorprender en esa comida o cena de invitados, no podrán resistirse a probarla. Además, podemos dejarla hecha con antelación y sólo tendrás que calentarla. Aunque también te recomiendo que la pruebes fresquita para el verano.
Recordaros que la crema de guisantes es rica en proteína, al estar dentro de la familia de las leguminosas. Además, son bajos en calorías por lo que podemos consumirlos perfectamente en una dieta hipocalórica.
Anímate a probarla, te va a encantar
CREMA DE GUISANTES
Descripción
Una receta que seguro vais a repetir en casa. Ligera, saludable y sencilla, para preparar en cualquier momento.
Necesitarás
Para decorar
Cómo hacer crema de guisantes
-
Lava y pica la cebolla en trocitos. En una cazuela, rehoga la cebolla con la cucharadita de aceite de oliva virgen extra y cuando empiece a ablandarse, añade la patata pelada y troceada. Rehoga un par de minutos más.
-
Incorpora los guisantes congelados y cubre con el caldo vegetal o con agua. Cuando empiece a hervir, añade un poco de sal y pimienta negra molida (al gusto). Baja a fuego medio y deja que hierva suavemente durante 15 minutos.
-
Antes de triturar, quítale un poco del agua de cocción. Reserva ese caldo por si luego quieres añadirle un poco hasta ajustar la textura que más te guste.
-
Tritura y pasa la crema por un pasapurés o chino si la quieres más fina.
-
Con las manos, forma 8 bolitas con el queso de untar y rebózalas por las semillas de sésamo. Justo en el momento de servir, cóloca dos bolitas en cada plato. Y ya esta lista nuestra cremita verde.
- Cantidad por porción
- Calorías 186kcal
- % Valor diario *
- Grasa total 6.8g11%
- Grasa saturada 0.6g3%
- Sodio 3.8mg1%
- Potasio 226.2mg7%
- Carbohidratos totales 19.2g7%
- Fibra dietética 6.6g27%
- Azúcares 2.9g
- Proteína 11.4g23%
* Los valores porcentuales diarios se basan en una dieta de 2,000 calorías. Su valor diario puede ser mayor o menor según sus necesidades calóricas.
Notas
- Para hacer esta receta vegana sólo tienes que eliminar un ingrediente, el queso de untar.
- Usa caldo en vez de agua. Si cocemos los ingredientes en caldo de verduras (que podemos guardar cuando cocinemos alguna verdura como judías verdes...) enriquecemos mucho más la crema.
- Quita casi todo el caldo antes de triturar. Muchas veces cuando se tritura todo, la textura que queda no es la deseada. Es mejor quitar parte del caldo y luego agregarlo poco a poco.
- Usa algún lácteo para dar cremosidad. Podemos usar nata, leche evaporada, queso de untar o mantequilla. Esto aportará textura y cremosidad a nuestra crema. ¡Pero ojo! también calorías.
No dudes en dejarme un comentario para contarme qué te ha parecido, si tienes alguna sugerencia o si te ha surgido alguna duda o consulta sobre la preparación.
Me encanta además tan bien explicado los pasos, gracias por tu tiempo 🥰
Muchísimas gracias Elizabeth. Me alegra saber que se entienden bien los pasos ☺️ y que te guste 🥰!